Una avenida abandonada

Son varias las realidades que conviven en Pedro de Mendoza, la avenida que acompaña al Riachuelo en el barrio de La Boca. Está la parte de las postales, con el viejo puente de marco o la calle Caminito, repleta de turistas y bien custodiada por la policía. También la zona de las barracas y depósitos portuarios, que se extiende hacia el sur. Y otra que preocupa a los vecinos: el tramo que va desde el puente Nicolás Avellaneda hasta el comienzo de Puerto Madero, donde hay un asentamiento cada vez más grande y los bajo autopista están copados por una arenera, una cabecera de colectivos y varios estacionamientos. El deterioro es tan grande que el trazado de la avenida por momentos se pierde y es difícil avanzar.

“Hace 15 años que la situación viene empeorando –asegura Alfredo Alberti, de la Asociación de Vecinos de La Boca, que juntó 3.000 firmas pidiendo la reurbanización de la avenida Pedro de Mendoza–. Uno de los sectores conflictivos es el asentamiento que está frente al destacamento de Prefectura de Boca del Riachuelo. Empezaron ocupando un terreno del Gobierno porteño en la esquina de Lamadrid y Pedro de Mendoza. Después se instalaron en la vereda y en parte de la calzada. Finalmente ocuparon más terrenos en el bajo autopista. Casi toda es gente de trabajo, pero otra no. Y en la zona hay mucha inseguridad y nadie se anima a pasar de noche”.

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